El escándalo no tiene fin, las campeonas del mundo acudieron a la citación

El fútbol femenino español se encuentra inmerso en una crisis desencadenada por un polémico beso entre Luis Rubiales y Jenni Hermoso, que ha llevado a la renuncia del presidente de la Federación Española de Fútbol, un juicio por abuso en curso y la negativa de varias jugadoras campeonas del mundo a representar a su nación mientras las personas de confianza del controvertido dirigente ocupen cargos clave. A pesar de este contexto, la nueva entrenadora de la selección femenina, Montse Tomé, ha convocado a veinte de las firmantes del comunicado de protesta, generando incertidumbre sobre su participación en los próximos partidos.

Hasta el momento, seis de las jugadoras convocadas, incluyendo a campeonas del mundo como Misa Rodríguez, Olga Carmona, Oihane Hernández, Athenea del Castillo y Eva Navarro, han llegado a un hotel cercano al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas para unirse al cuerpo técnico de Montse Tomé. Aunque la mayoría optó por no hacer declaraciones, Rodríguez expresó su insatisfacción con la convocatoria, mientras que Del Castillo afirmó que ya había expresado su posición en el comunicado y que cumpliría con la convocatoria.

La incertidumbre persiste sobre si todas las jugadoras convocadas estarán disponibles para los partidos de la Liga de Naciones contra Suecia y Suiza. A pesar de esto, la entrenadora Montse Tomé se muestra optimista y confía en que las jugadoras se presentarán, ya que el comunicado expresaba la firme voluntad de no ser convocadas por motivos justificados.

La concentración no se llevará a cabo en la ciudad del fútbol de Las Rozas (Madrid), como es habitual, sino en Denia (Alicante), lo que complica el viaje de algunas jugadoras que deben llegar directamente a Valencia para unirse al equipo.

¿Cómo se resolverá la situación?

El Consejo Superior de Deportes (CSD) se reunirá con las jugadoras que han firmado el comunicado oficial en contra de la RFEF con el objetivo de resolver el conflicto. Víctor Francos, presidente del CSD, será el encargado de mediar en este conflicto entre las futbolistas y la Federación. El gobierno español ha expresado su apoyo a las jugadoras y su deseo de que la selección española pueda jugar sus partidos.