Por German Morán
El mundo del fútbol no deja de sorprendernos, y esta vez, fue el carismático José Mourinho quien se robó el protagonismo. Después de una victoria agónica de la Roma contra el Monza en la Serie A italiana, el entrenador portugués aprovechó la conferencia de prensa para lanzar una broma sobre el caso de doping positivo del argentino Papu Gómez.
El conflicto entre Mourinho y el mediocampista argentino comenzó hace una semana, cuando Papu Gómez hizo comentarios sobre su enfrentamiento previo en la Europa League. Mourinho, siempre dispuesto a responder, señaló que no recordaba haberse enfrentado a Gómez en esa final y agregó que le parecía que el jugador había tenido un control antidopaje positivo durante ese tiempo.
Con su característico humor, Mourinho expresó: "No es mi problema. Tengo tos, pero no quiero tomar ni jarabe ni pastillas. O podría tener problemas para pasar las pruebas antidoping...". Esta declaración provocó risas en la sala de prensa y dejó en claro que Mourinho no tenía intenciones de dejar pasar la oportunidad de hacer una broma.
La relación entre Mourinho y Papu Gómez ha sido tensa desde hace un tiempo, y estas declaraciones solo añaden más leña al fuego. El argentino, por su parte, emitió un comunicado confirmando que había puesto el asunto en manos de sus abogados y reconociendo su sanción de dos años sin jugar debido a su positivo por terbutalina.
La victoria de la Roma contra el Monza fue agónica, con un gol de Stephan El Shaarawy sobre la hora que desató el efusivo festejo de Mourinho. Sin embargo, este celebró de una manera provocadora, simulando un llanto y pidiendo silencio al banco de suplentes del equipo rival, lo que le valió la tarjeta roja por parte del árbitro.
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