Por German Morán
En un giro sorprendente de los acontecimientos, Luis Rubiales, el ex presidente de la Federación Española de Fútbol, ha respondido a las acusaciones de agresión sexual y coacciones en su declaración ante la Audiencia Nacional. Estas acusaciones surgieron a raíz de un incidente que tuvo lugar al término de la final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda, donde Rubiales besó a Jenni Hermoso.
Según fuentes de la representación legal de Rubiales, durante su comparecencia en la Audiencia Nacional, el ex presidente negó vehementemente todas las acusaciones en su contra. En sus respuestas, Rubiales sostuvo que el beso que dio a Jenni Hermoso contó con su consentimiento, desafiando así las alegaciones de agresión sexual. Además, negó haber intentado coaccionar a la jugadora para que colaborara en un vídeo en el que ofreció una disculpa por el incidente.
Las acusaciones en contra de Rubiales han generado una gran atención mediática y controversia, ya que involucran a una figura prominente del fútbol español y una destacada jugadora.
La Fiscalía, en respuesta a estas acusaciones, ha solicitado medidas cautelares que incluyen la comparecencia periódica de Rubiales ante las autoridades cada 15 días y una orden de alejamiento que lo mantendría a 500 metros de distancia de Jenni Hermoso mientras dure la instrucción del caso.
Este caso continuará siendo seguido de cerca por la opinión pública y la comunidad futbolística, ya que plantea cuestiones importantes sobre la integridad en el deporte y la importancia de abordar las acusaciones de manera justa y equitativa. La Audiencia Nacional deberá llevar a cabo una investigación exhaustiva para determinar los hechos y llegar a una conclusión en este caso que ha generado un gran revuelo en el mundo del fútbol.
21/02/2024
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