Por German Morán
El Barcelona se divirtió en su despedida del Camp Nou en el que superó por 3-0 al Mallorca, en un encuentro en el que poco importó el resultado deportivo, más sí lo que envolvía el entorno y la fiesta preparada en el Camp Nou: la despedida de una leyenda del fútbol como Jordi Alba, y de su estadio, el cual será cerrado porque tendrá mejoras y se volverá abrir en 2024.
Ansu Fati, marcó doblete a los 1 y 24 minutos respectivamente, mientras que el tercer y último tanto fue anotado por Gavi. Pero lo más emotivo del compromiso fue la despedida de Jordi Alba, que despertó lagrimas entre los presentes.
El lateral se marchó entre lágrimas al ser sustituido a los 81 minutos, sustituido por Marcos Alonso, y con una abierta sonrisa lo hizo cuatro después Sergio Busquets cuando su lugar lo ocupó Èric García, despidiéndose con la satisfacción de lo que ha significado su carrera en el club azulgrana.
Se acabó una era. Se cerró con la marcha del capitán el recuerdo del mejor Barça de la historia moderna y así se lo supo agradecer una hinchada que nunca falla, más allá de ánimos impostados y dirigidos, con la mejor de sus ovaciones, según reportó la cadena ESPN.
El camino de Jordi Alba no fue el de otros canteranos del FC Barcelona. Se tuvo que ir para demostrar su valía. Y cuando volvió, proveniente del Valencia, se adueñó del puesto de lateral izquierdo durante más de una década. Fueron 27 goles, 91 asistencias, 459 partidos y 18 títulos con el primer equipo del Barça. “Una noche que nunca olvidaré. Espectacular la gente!! Solo puedo decir �������������� por haberme hecho pasar uno de los días más bonitos de mi carrera y despedirme del club de mi vida entre tanto cariño, en el último partido que se va a jugar en este Camp Nou” reseñó Jordi Alba en su cuenta de twitter.
21/02/2024
21/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
20/02/2024
19/02/2024
19/02/2024
19/02/2024
19/02/2024